El 46% de los conductores no se somete a un examen optométrico ni una vez al año, aumentando el riesgo de accidentes





Un 40% de los accidentes de tráfico se debe a las distracciones visuales al volante





Con las fiestas de Semana Santa y la llegada del buen tiempo, se multiplican los desplazamientos por carretera. Si es importante tener a punto el vehículo y revisarlo antes de viajar, lo mismo hay que hacer con la visión. Más aún si tenemos en cuenta que el 90% de la información que se percibe al conducir llega a través de la vista, por lo que las condiciones visuales son determinantes para la conducción y guardan una significativa relación con los accidentes producidos por fallos humanos y distracciones visuales.





Según el Colexio de Ópticos Optometristas de Galicia, “si todos los conductores nos revisásemos la vista cada año se reducirían los accidentes”. El problema está en que el 46% de los automovilistas no lo hace, aumentando, por tanto, el riesgo de sufrir accidentes de tráfico.





Enemigos de la conducción





Fatiga visual: Todo lo que implica un uso continuado de los ojos provoca fatiga. La conducción requiere un esfuerzo constante con un altísimo grado de demanda visual. La aparición de estímulos es constante y estos se reciben en su mayoría (90%) a través de la vista. Ante la fatiga visual, el Colexio gallego recomienda parar el coche, cerrar los ojos o mirar a lo lejos, sin fijar la atención en ningún detalle, para que así se relajen los ojos.





Noche: Los accidentes de tráfico aumentan durante la noche y la agudeza visual se reduce hasta en un 70%. No se perciben igual los colores, y se puede perder la sensación de relieve. Además, hay conductores que padecen miopía nocturna y que deberían usar las gafas correctoras durante la noche. Si se utilizan lentes de contacto, los ojos se resecan más, por lo que es conveniente, por la noche, sustituirlas por unas gafas correctoras dotadas de un cristal lo más transparente posible.





Amanecer y anochecer: Son las peores horas del día en cuanto a luminosidad se refiere. Los automovilistas que tienen defectos visuales lo van a notar especialmente. Además, en estos momentos del día el sol está muy bajo y se puede sufrir un deslumbramiento.





Aliados de la vista





Revisiones periódicas: Dada la importancia de la información visual, es fundamental que nuestra vista esté en el mejor estado posible. Por ello es muy recomendable hacerse revisiones periódicas y, aquellas personas con problemas de visión y que necesiten gafas, deben seguir las recomendaciones de su óptico-optometrista.





Gafas de sol: En estos días de alta luminosidad y en los momentos en los que haya cambios bruscos de luz, las gafas de sol son imprescindibles. Pero hay que tener mucho cuidado con el tipo de gafas de sol, ya que según el Colegio, el 70% de las gafas de sol que se venden en España (fuera de los establecimientos sanitarios de óptica) no cumplen con las normas de seguridad sanitarias. Las gafas más adecuadas son las que tienen filtro solar de categoría menor de 4. El color de los cristales más recomendado es el gris, ya que transmite uniformemente la luz a través del espectro y respeta mejor los colores naturales. El cristal polarizado es el ideal para la conducción ya que evita los reflejos más molestos del sol. Los conductores de motocicletas y ciclomotores deben llevar gafas de sol que sean lo suficientemente envolventes para impedir que las partículas de polvo u otros cuerpos extraños penetren en los ojos, además de gafas que no limiten el campo de visión, evitando las monturas anchas que obstaculizan la visión lateral.





Gafas de repuesto: los ópticos optometristas gallegos recomiendan que “antes de realizar un viaje hay que someterse a una graduación de la vista, y conviene llevar siempre unas gafas de repuesto en el coche y que éstas sean de la misma graduación que las que utilizamos habitualmente”.





Lo que dice la Ley (Código de Tráfico y Seguridad Vial, edición actualizada a 27 de febrero 2023)





-No es obligatorio llevar gafas o lentes de contacto de respuesto, pero sí es obligatorio llevarlas durante la conducción si así ha quedado reflejado en el Informe de Actitud Psicofísica (psicotécnico).





-Si la persona se ha operado de cirugía refractiva (miopía, astigmatismo…), la Ley establece que hay que estar un mes sin conducir desde la operación (tres en caso de los profesionales de la conducción). Después, se tendrá permiso para conducir durante un año, y tras ese tiempo, es necesario volver a revisarse la vista.





Uso de los sistemas de navegación y HUD





Según el Colexio de Ópticos Optometristas de Galicia, aproximadamente un 40% de los accidentes de tráfico se deben a las distracciones visuales al volante. Así, este colectivo aconseja a los conductores que en caso de utilizar sistemas de navegación y multimedia se usen las indicaciones sonoras que ofrecen para evitar mirar a la pantalla en la medida de lo posible. Pero en la actualidad, existen diveros modelos de automóviles que incluyen una pantalla de visualización frontal entre sus extras. Se trata de un head-up display (HUD) que proyecta información en la línea visual del conductor, de tal forma que no tiene que desviar la vista de la vía para ver dicha información. Con este sistema el conductor no desvía la mirada de la carretera y gana sobre 0,5 segundos de pérdida de visión.



El objetivo primordial del nuevo mandato será la creación de la categoría de óptico-optometrista en Atención Primaria y su inclusión en la cartera de servicios del SERGAS





Natural de Ourense y afincada en Vigo, Amaro asume la presidencia con “gran responsabilidad” y advierte que “falta mucho por hacer”





El Colexio Oficial de Ópticos Optometristas de Galicia (COOG) presenta su nueva junta de gobierno que tomó posesión de sus cargos el pasado domingo, 5 de marzo, en la sede de la institución en Santiago de Compostela. Las elecciones se convocaron el pasado mes de diciembre, pero tras el vencimiento de los plazos se presentó una sola candidatura que fue proclamada electa.





El nuevo equipo de gobierno, que ejercerá sus funciones hasta 2027, está compuesto por su presidenta, Esther Amaro Quireza (Avión, Ourense, afincada en Vigo), la primera mujer óptico-optometrista que ostenta el cargo en Galicia; el vicepresidente, Olegario Cortiñas Fariña (Mugardos, afincado en Santiago); la secretaria, Rosa África Seoane Cordal (Vigo); el tesorero, Alexander Dubra Fernández (Caracas, afincado en Teo); el contador, Gabriel Andrés Hofkamp Zinna (Godoy Cruz Mendoza, Argentina, afincado en Bueu); el delegado provincial de A Coruña, Bernardino Uhía Martínez (Muros, afincado en Santiago); el delegado provincial de Lugo, Manuel Alberto Diéguez Estévez (A Gudiña, afincado en Lugo); la delegada provincial de Ourense, María Teresa Moreno Campos (Ourense); la delegada provincial de Pontevedra, María Pilar Lourés Carballal (Vigo); la vocal representante de Colegiados No Ejercientes, María Covadonga Vázquez Sánchez (Lalín, afincada en Santiago) y el vocal representante de Formación y Cultura, Carlos García Resúa (Boiro, afincado en Santiago).





Esther Amaro Quireza estudió la Diplomatura de Óptica en la Universidad Complutense de Madrid, graduándose en 1985, para finalmente adaptar su titulación a la Diplomatura de Óptica y Optometría en la Universidad de Granada en 1995. Realizó diferentes cursos sobre contactología y otras materias relacionadas con la profesión. Inicialmente trabajó en Madrid como óptico-optometrista en un establecimiento sanitario de óptica, hasta que se trasladó a Vigo en 1989, donde abrió su propio establecimiento. En su faceta colegial se inició como delegada de la provincia de Pontevedra, y más tarde se convirtió en secretaria, cargo que mantuvo hasta ahora.





La nueva presidenta explica que los objetivos fundamentales de su mandato serán luchar por la creación de la categoría de óptico-optometrista en Atención Primaria y la inclusión de la optometría en la cartera de servicios en el Servizo Galego de Saúde (SERGAS); potenciar la formación del óptico-optometrista a través de cursos y jornadas; defender la autorregulación sobre la venta digital de productos sanitarios; fomentar la concienciación del valor del trabajo profesional mediante campañas; promover el reconocimiento del óptico-optometrista como profesional universitario sanitario encargado de la salud visual de los gallegos; y continuar negociando con el SERGAS y la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia un convenio de colaboración que dignifique la labor del óptico- optometrista, que redunde en beneficio de la población, y que consiga que el acceso a este servicio sea igualitario en todo el territorio gallego.





“Es una gran responsabilidad para mí asumir la presidencia, porque el Colexio debe velar por la salud visual de la población, un reto trascendental, diría yo. Y lograr mayor reconocimiento clínico y sanitario. Naturalmente, defender la profesión y vigilar que se cumplan todos los requisitos, así como mantener la actualización permanente de conocimientos entre los colegiados, son atribuciones propias no menos importantes. He trabajado muy a gusto con los dos presidentes anteriores, Eduardo Eiroa y Enrique Valcárcel, profesionales muy implicados que han dejado el nivel muy alto. Y, aunque el camino está sembrado, falta mucho por hacer y que pelear. Así que este es el desafío de la nueva junta de gobierno”, advierte Amaro.





“Es un orgullo para mí ser la primera presidenta colegial, dirigir una junta de gobierno paritaria y con la incorporación de gente joven, que seguro tienen mucho que aportar. Cuando empecé a tener cargos colegiales, hace años ya, siendo la delegada provincial de Pontevedra, éramos dos mujeres y ocho hombres en la directiva. También es cierto que siempre me sentí muy arropada y apoyada. Pero a nadie se le escapa que somos una profesión mayoritariamente femenina”, añade.





Conversión en Colexio Oficial de Ópticos Optometristas de Galicia





Además, en la Asamblea Colegial Constituyente se aprobaron los Estatutos del recientemente creado Colexio Oficial de Ópticos Optometristas de Galicia, ya que hasta ahora era la Sexta Delegación del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas. El prólogo del texto legal dice: “La Optometría es una profesión de la salud, titulada y colegiada, que presta un servicio esencial a la sociedad. La persona que ejerza la profesión de óptico- optometrista, como profesional de gran experiencia, reúne los conocimientos científicos y las competencias necesarias para llevar a cabo en su totalidad el proceso de atención optométrico de pacientes a su cargo, en el ámbito de su autonomía en el ejercicio de su profesión sanitaria, con la mayor calidad posible”.