Uno de cada tres présbitas gallegos ha sido remitido al especialista en el último año por los ópticos-optometristas, según los datos del convenio “Ollo cos Ollos”

Eduardo Eiroa, presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas: “Las gafas premontadas actúan como una lupa, ignorando aspectos como la visión binocular o el astigmatismo que se puedan sufrir, con lo cual jamás serán la solución más útil para la vista cansada” 

La alcaldesa de Lugo hace un llamamiento a la sociedad para que sea consciente de la necesidad de prevenir y revisar su salud visual 

El Colegio profesional ha celebrado hoy en Lugo el Día de la Optometría con un stand informativo sobre la presbicia 

El Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia celebró hoy el Día de la Optometría, dedicado este año a la presbicia. El presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia, Eduardo Eiroa, la secretaria de la entidad, Esther Amaro, y el delegado en Lugo de la entidad, Alberto Diéguez, presentaron la efeméride en un stand informativo situado en el centro de Lugo, en la Praza Maior. Estuvieron acompañados en este acto por la alcaldesa de la ciudad, Lara Méndez, y el jefe Territorial de Presidencia en Lugo, Ramón Carballo.

También conocida como vista cansada, la presbicia es un defecto fisiológico que comienza a manifestarse a partir de los 40 años. Según los datos del convenio Ollo cos Ollos –puesto en marcha por la Consellería de Sanidade, el Servizo Galego de Saúdo y el Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia– para la realización de exámenes visuales en los 647 establecimientos de óptica de Galicia, actualmente un 45% de los gallegos tienen presbicia, de los cuales un 33% fueron remitidos al especialista en el último año por alguna alteración visual detectada en la interconsulta que no se soluciona con gafas y que posiblemente necesite un tratamiento médico-quirúrgico.

El presidente Eiroa explicó que la presbicia es un estado refractivo en el que la capacidad de acomodación o enfoque del ojo se muestra insuficiente para desempeñar cualquier tipo de actividad en visión próxima. “Con el paso del tiempo, el músculo ciliar y el cristalino pierden la capacidad para aumentar la potencia refractiva del ojo lo que dificulta ver bien de cerca” –concretó–.

Además, el presidente señaló que las personas que comiencen a manifestar síntomas de presbicia deben acudir al óptico-optometrista que, tras los exámenes pertinentes, les aconsejará acerca de la corrección visual más adecuada en función de sus necesidades, características y estilo de vida. En este sentido, existen varios tratamientos ópticos para la presbicia, entre los que se incluyen las lentes monofocales, bifocales, trifocales y progresivas y las lentes de contacto.

Lara Méndez destacó que la ciudad de Lugo siempre ve con “buenos ojos” acciones divulgativas de interés general para la población y, “si son de carácter sanitario, mejor todavía, ya que tenemos muy presente el envejecimiento demográfico”.

La alcaldesa indicó que el Concello de Lugo se suma este año a la celebración del Día de la Optometría, dedicado a la presbicia o pérdida de visión de cerca, “algo que termina por afectarnos a todos”. Además, Méndez agradeció al colegio profesional su invitación y la elección de la ciudad para celebrar este año efeméride tan relevante, al tiempo que animó a los vecinos a que se den una vuelta por la carpa pública, donde serán atendidos por estos especialistas. Finalmente, hizo un llamamiento a la sociedad para que sea consciente de la necesidad de prevenir y revisar su salud visual, “xa que moitas veces cando temos unha doenza visual deixámola de lado”.

Por su parte, Ramón Carballo destacó que este acto pretende dar vsibilidad a un problema que afecta a toda la población, como es la presbicia o vista cansada que “afecta a oito de cada dez persoas maiores de 45 anos”. Señaló también que esta inciativa sirve para concienciar a la gente de este problema y mantener una salud visual apropiada que ayudará a propiciar una calidad de vida adecuada, “gozando da lectura, dunha película ou de realizar actividades da vida cotiá como a conducción garantindo a súa seguridade ao volante”.

Los expertos también explican que en muchas ocasiones, las personas recurren a las conocidas “gafas premontadas” para atajar el problema de la presbicia. También conocidas como gafas de cerca prefabricadas (reading glasses) son artículos elaborados de forma estándar para todos los usuarios, en su inmensa mayoría a partir de materiales y lentes de aumento de baja calidad óptica. Este tipo de artículo se vende de forma indiscriminada en numerosos establecimientos, como tiendas de regalo, bazares, estancos, gasolineras o supermercados llegando incluso a tops-manta y mercadillos, sin contar con controles y un asesoramiento de profesionales sanitarios visuales, como son los ópticos-optometristas.

Eduardo Eiroa considera que las gafas premontadas “no son la solución idónea” para la vista cansada, ya que además de no estar individualizadas, las personas suelen adquirirlas sin pasar por una consulta optométrica donde se les realiza un examen visual completo que puede ayudar a prevenir posibles problemas visuales graves en un futuro. “Las gafas premontadas son simplemente lupas de plástico inyectado de baja calidad óptica que aumentan las imágenes y las pueden distorsionar, y actúan con igual graduación en ambos ojos, ignorando aspectos como la visión binocular o el astigmatismo que se puedan sufrir, con lo cual jamás serán la solución más útil para la vista cansada” –aseguró el presidente Eiroa–. La adaptación individualizada por parte de un óptico-optometrista es imprescindible porque cada persona presenta unas características morfológicas y anatómicas distintas. Según un estudio de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), solo un 2,24% de la población presenta un defecto visual que podría ser corregido con gafas premontadas.

El presidente del colectivo apuntó también que la gafa premontada fue diseñada inicialmente con el único objetivo de servir para un “uso de emergencia muy puntual”, sustituyendo a la gafa de cerca prescrita por un óptico-optometrista, fabricada y montada de forma individualizada para cada paciente concreto. En este punto, Eduardo Eiroa manifestó que la utilización de esta gafa de forma continuada en el tiempo para tareas de cerca, como la lectura, puede provocar importantes daños visuales en la población, sobre todo en aquellas personas que ya poseen anomalías en su visión y lo desconocen o lo ignoran. 

Riesgos de utilización de las gafas premontadas

El Colegio profesional destaca que el uso continuado de este tipo de gafas de lectura premontadas puede originar una serie de deficiencias en la visión que, a largo plazo, podrían derivar en problemas más graves:

  • Desarrollo o aumento de problemas visuales por la falta de un control profesional (ya que estas personas adquieren las gafas por ellas mismas sin someterse a un examen visual realizado por un óptico-optometrista).
  • Incapacidad o errores en el cálculo de las distancias en un ámbito próximo.
  • Lagrimeo y aparición dolores de cabeza y vértigos.
  • Imposibilidad de concentración, malestar, irritación y fatiga visual prematura.
  • Desarrollo o aumento de patologías visuales por la falta de control profesional.
  • Cansancio y bajo rendimiento visual y/o laboral.
  • Futuros problemas de adaptación a lentes progresivas.
  • Alteraciones en la acomodación y aumento descontrolado de la presbicia y otras deficiencias visuales.
  • Alteración del equilibrio oculomotor, provocando problemas de alineamiento
  • Desequilibrios binoculares, que pueden derivar en astenopías